It was filmed in the Riviera Theatre in Chicago back in March 2010 and tied in with the release of their self-titled album. it intersperses such songs from that album as ‘Between The Lines’, ‘Huckleberry Crumble’ and ‘Hickory Dichotomy’ with some classic hits like ‘Vasoline’, ‘Big Empty’, ‘Plush’, ‘Sour Girl’ and ‘Interstate Love Song’. It works very much like one long visual album; there aren’t any audience reactions or cheering, but we think the show benefits from this leading us from song to song with quick editing and a frenetic pace.
The filming is impeccable and the sound is crisp, it really keeps in with their original albums. Scott [Weiland]’s voice is still strong, at times strained but considering he’s in his forties and has a checkered past with addiction it’s great to see him back on form and rocking out like and old-school pro which is incredibly satisfying. The rest of the band consisting of Robert DeLeo on bass who we get to hear his backing vocals, Dean DeLeo rocking the guitars, and Eric Kretz beating the drums are on a high throughout, the play fast and enthusiastically never once losing their edge. This combined with some crazy lighting and incredible backdrops (images of fire and trippy colours swirling on a projection screen behind them in time with the tunes) it keeps your attention the whole time and makes you want to rock out in your living room.
There’s also a really good interview with the band included on the BLURAY, which possibly says more about them than the gig itself; Scott is quite rock-and-roll-pretentious giving one word answers in his shades but the rest of the band are pretty jovial, joking around ribbing each other, it shows they’ve matured since their grungy days but still love what they do. The interview asks some decent questions about the conception of the album and their ideas and gives a small insight into how they work as artists, a nice addition for the fans. Overall the BLURAY is great; feels a little short but coming in at just over an hour and a quarter you really lose track of time. The band are all back in top form and some of their greatest songs are played at their best.
Filmado en el Teatro Riviera en Chicago en marzo de 2010 y vinculado al lanzamiento de su álbum homónimo, intercala canciones de ese álbum como ‘Between The Lines’, ‘Huckleberry Crumble’ y ‘Hickory Dichotomy’ con algunos éxitos clásicos como ‘Vasoline’, ‘Big Empty’, ‘Plush’, ‘Sour Girl’ e ‘Interstate Love Song ‘. Funciona muy parecido a un álbum visual largo; no hay reacciones o vitoreos de la audiencia, pero creemos que el espectáculo se beneficia de esto, lo que nos lleva de canción en canción con una edición rápida y un ritmo frenético.
La filmación es impecable y el sonido es nítido, realmente se mantiene con sus álbumes originales. La voz de Scott [Weiland] aún es fuerte, a veces tensa, pero teniendo en cuenta que tiene más de cuarenta años y tiene un pasado de cuadros con adicción. Es genial volver a verlo en forma y rockear como un profesional de la vieja escuela que es increíblemente satisfactorio. A Robert DeLeo podemos escuchar sus coros a plenitud, Dean DeLeo tocando las guitarras, y Eric Kretz en la batería. Son los mejores en conjunto, con la forma rápida y entusiasta de no perder nunca su ventaja. Esto, combinado con un poco de iluminación loca y fondos increíbles (imágenes de colores de fuego que se arremolinan en una pantalla de proyección detrás de ellos al ritmo de las melodías), mantiene su atención todo el tiempo y lo hace querer rockear en su sala de estar.
También hay una muy buena entrevista con la banda incluida en BLURAY, que posiblemente dice más sobre ellos que el concierto en sí; Scott es bastante pretencioso de rock and roll y da respuestas de una sola palabra en sus matices, pero el resto de la banda es bastante jovial, bromeando entre sí, muestra que han madurado desde sus días sucios pero aún aman lo que hacen. La entrevista hace algunas preguntas decentes sobre la concepción del álbum y da una pequeña idea de cómo trabajan como artistas, una buena adición para los fanáticos. En general el BLURAY es genial; se siente un poco corto, pero llegando en poco más de una hora y cuarto, uno realmente pierde la noción del tiempo. Se ve a la banda estar de vuelta en su mejor forma y algunas de sus mejores canciones se tocan de la mejor manera.